quarta-feira, 2 de janeiro de 2019

SERIE: ODAS RARAS "LA VENTANA"


Estimados amigos, hoy empiezo un nuevo ciclo de poesía al cual llamé "Odas raras", son escritos míos "sin sentido, pero con todo el sentido del mundo" que quisiera compartir con ustedes. Responde a una necesidad de desahogarme momentáneamente haciendo uso de "esta vieja manía de confesar lo inconfesable a alguien, como a esta hoja de papel donde plasmo corazón, fuerza y piel".

Espero que no me juzguen mal, ni tampoco crean que soy un hombre taciturno, melancólico y triste. Debo confesar que sí tengo mis ratos de melancolía y tal vez hayan sido estos los que me motivaron a escribir esta oda corta llamada "La Ventana", hoy 2 de enero de 2019.




Un día abrí mi ventana.
En realidad abro mi ventana todos los días,
Pero aquel día vi lo que siempre veía,
Una Montaña, vestida de verde tropical
y bañada de un azul celestial.
Pero dentro de mí
me ahogo en un triste y grisáceo invierno
¿Quieres que te hable de mi invierno o del verano del día?
Porque estas cosas son incomprensibles
para los que suelen estudiarlo todo.
Por eso, no te lo contaré.
La pesadilla de tu ser
atormenta mi alma.
¡Y secreto es secreto!
¡Amor es amor!
Cada cosa en su lugar...
Sí, siento rabia
Esa es la verdad.
La más pura realidad
Y también debo decirte que deseo la muerte...
como el viajante en el desierto desea agua.
Y morir es liberarse, ganar alas y volar,
Y las cumbres de aquella montaña,
de la cual hablé hace poco ¿te acuerdas?
Quisiera que esas cumbres fueran el punto
de esta locura de "muerte"
Desde allí mi ser muerto o mi espíritu vería toda la ciudad
Por cierto...¿de qué color es la ciudad?
Para mí es imposible decirlo ahora.
Porque es necesario morir,
ganar alas, volar
y contemplar
esa unión de casas, calles y seres
a la que llamamos "la ciudad".
YO también soy parte de esa "ciudad"
y estoy en mi casa,
y abrí la ventana
y ahora veo la montaña.

RS

Sem comentários:

Enviar um comentário

Como um sonho numa noite de verão

Como um sonho numa noite de verão De janelas abertas e cortinas brancas Por onde passa uma fresca e doce brisa Assim és tu com o teu s...